Historias en la memoria

Aquel viejo de barba blanca y abrigo raído había pasado aquella calurosa noche del 15 de julio por aquel pueblo, uno de tantos que se extienden por la geografía de aquel país. Nadie sabía de donde venía ni a nadie pareció interesarle.
A toque de cornetín convocó a la gente en la plaza y allí acudieron para escuchar sus historias más por costumbre y curiosidad que por verdadero interés.
Podría decirse que sus palabras cayeron entre la gente igual que las de otros muchos que pasaban por allí cada verano, así pues no demostraron especial entusiasmo.

Aquella gente, de vida dura y laboriosa, solía ocupar sus pensamientos en meras cuestiones cotidianas siendo rara la vez que se entregaban a reflexiones más profundas.

Pasados dos días la gente empezó a comentar sus impresiones sobre las historias que les había contado.
Por algún extraño proceso mental la historia quedó impregnada en el subconsciente de aquella gente. Poco a poco se iban borrando de sus memorias las palabras superfluas de aquel relato y cuando ya solo quedaban las significativas se iban arraigando y haciendo más presentes. Como pinceladas de un cuadro impresionista, que unidas por el ojo van cobrando sentido, las palabras iban formando pensamientos trascendentes y comenzaban a desarrollarse como si de seres vivos se tratara.
Nadie podía imaginar que esas historias hubieran sido contadas allí por primera vez y que jamás volverían a repetirse y aún menos previsible era que tuvieran ese efecto que estaba alterando la vida de la gente de aquel tranquilo lugar.
Algunos dijeron de buscar a aquel extraño contador de historias pero su búsqueda fue inútil.
Es improbable que ustedes se crucen con aquel hombre y más aún que escuchen las historias tal como fueron contadas aquella noche pero quizás algún día oigan hablar de las ideas que a partir de aquel momento empezaron a crecer en las cabezas de aquellos hombres.

1 comentario:

circe dijo...

espero haber llegado al meollo de la cuestión pero ...el tiempo nos da una muy buena perspectiva de las cosas,,,